Hebreos 1:1-2

Dios, habiendo hablado muchas veces y de muchas maneras en otro tiempo a los padres por los profetas, en estos postreros días nos ha hablado por el Hijo, a quién constituyó heredero de todo, y por quien asimismo hizo el universo.











25 de marzo de 2010

Comprenda el Corán


Comprenda el Corán
Una guía rápida cristiana al libro santo musulmán
Autor: Mateen Elass

El Dr. Mateen Elass, es un pastor presbiteriano, quien vive y trabaja en los Estados Unidos, donde también ha estudiado; posee títulos de algunas universidades de Norteamérica y también de Inglaterra. Sin embargo él ha sido criado en Arabia Saudí en un ambiente completamente musulmán; lo que le asigna la autoridad suficiente para escribir un libro como este, y que se convierte para nosotros en una lectura muy enriquecedora.
El autor hace una presentación completa, a cerca de la problemática del crecimiento invasivo que tiene el islam en el mundo; nos cuenta cómo consideran ellos al Corán, la reverencia que muestran hacia su libro sagrado, incluso desde niños, la costumbre muy enraizada de memorizar muchos de sus párrafos, y cómo influye en su vida y conducta frente a los demás, el considerar de esta manera ese libro. También nos llama a pensar, cómo influiría en nosotros el tener ese grado de consideración y reverencia hacia la Biblia, cómo en muchas ocasiones, nosotros no tenemos fundamentos para defender lo que decimos que creemos; es realmente una llamada de atención, en un campo en el que debemos trabajar de manera urgente. También nos permite atisbar el origen del Corán, conocimos de donde salieron esas escrituras, de la estrecha relación que tienen con el profeta (para ellos) Mahoma. Nos enteramos, como éste logró introducir sus primeras enseñanzas o revelaciones que traían un corte monoteísta, en una sociedad completamente politeísta; obviamente lo hizo, a costa de mucho esfuerzo y no sin peligro, pero fue sembrando en aquellos que las recibían, una ferviente devoción. Los musulmanes creen que el Corán fue realmente revelado por Dios a Mahoma mediante un ángel, y que `por lo tanto no hay escritura más sagrada que el Corán. Se dice que Mahoma recibió estas revelaciones solo en su mente, pues él era analfabeto por lo que no pudo escribirlas. Mahoma las transmitió en forma de recitaciones a sus seguidores, y no fue, sino hasta después de su muerte que estas revelaciones se reunieron y se decidió ponerlas en el papel; y al hacerlo se pudo detectar algunas diferencias entre los diferentes recitadores, lo que está en completa contradicción con la tradición musulmana, que dice que las escrituras del Corán se han mantenido siempre puras.
El autor también nos hace un recuento de algunos personajes bíblicos, de los que de alguna manera también se hace mención en el Corán, así como también de algunas enseñanzas bíblicas; que si bien no conservan el verdadero sentido y propósito que tienen en la Biblia, nos dejan entrever que Mahoma tuvo algún tipo de contacto con algunos cristianos helenizados o judíos disidentes, de los que obtuvo esta información, pero que no tuvo acceso a las fuentes semíticas originales. Existen fundadas razones para pensar que de allí extrajo algunas de sus ideas, que luego volcó en su predicación; ya que estas distorsionan la realidad tanto bíblica como histórica de las cosas, poniendo al Corán como una fuente vulnerable a la realidad y peso de la historia. Hay bastantes diferencias entre el Corán y la Biblia; para ser el libro musulmán una inspiración de Dios, debería poder resistir las mismas pruebas a las que ha sido sometida la Biblia. La defensa del Corán, como un libro verdadero de parte de Dios, es más que todo de corazón y de tradición y no de sustentación literaria e histórica. Las diferencias están especialmente en conceptos tales como el juicio final, el infierno, el cielo y el paraíso, etc.; también debemos considerar lo que nosotros llamamos ‘la gran comisión’ y que para ellos es el yihad, que literalmente significa ‘lucha, esfuerzo’, pero esta lucha dentro de las distintas posturas del islamismo tiene un significado práctico diferente; éste yihad ha pasado de la persuasión o predicación pacifica, al rechazo de las diferencias de opinión, llegando hasta la predicación radical y el expansionismo; entendiéndose en los sectores mas fundamentalistas, como una invitación a la lucha armada por la conquista del mundo, hasta que todo quede bajo la influencia y dominio de Alá.
Mateen Elass, nos llama a pensar en lo que podemos hacer nosotros, con respecto a la defensa del cristianismo de una religión que hoy en día, tiene un explosivo crecimiento en el mundo; que tiene mucha acogida, especialmente en aquellos sectores marginados de la sociedad, así como también en los sectores más liberales del cristianismo, entre los cuales se presenta una predicación de testimonio pobre y fundada principalmente en los beneficios y promesas que nos hace el Señor. Pero, nosotros tenemos que entender que el islam ha sido y será siempre una oposición al cristianismo, por lo que necesitamos mirar más de cerca la enseñanzas de Jesús que nos llaman a amar incluso a nuestros enemigos; nosotros debemos en este caso, convertirnos en los apóstoles del amor hacia nuestros prójimos, sin fijarnos en la clase social, creencia, raza o nacionalidad a la que pertenecen. También deberíamos mostrar más apego y amor hacia la palabra de Dios, donde encontraremos las más grandes riquezas, que nos permitan presentar a Jesús como el verdadero salvador del mundo. Optar por el camino de la confrontación en este caso, solo nos llevará a justificar la posición de ellos, que a veces va rayando el fanatismo, y así acrecentamos la brecha que existe en este momento entre cristianos y musulmanes; eso de ninguna manera quiere decir, que debemos quitarle el peso de verdad y poder que tiene la palabra de Dios en nosotros.
Es una lectura enriquecedora y muy oportuna para el lector latino, siendo que por estos días en nuestro medio las enseñanzas de Mahoma, aún no representan un frente franco de oposición para nosotros. Conocer las armas del enemigo, es desde luego tener una gran ventaja que nos permite saber por dónde atacar y como defendernos; pero es mucho mejor conocer nuestras propias armas, pues en ellas tenemos las mejores posibilidades de victoria. Aprendí con este libro varias cosas que no sabía, y creo que me serán muy útiles en el futuro. Me deleité con él, y lo recomiendo como lectura de instrucción y también de entretención; pues el autor se ha esforzado en presentar el tema de una manera llana, apasionante y bastante ordenada. Que Dios los bendiga, amén.